Lo que me enseña mi maestro es que el camino hacia la liberación es un camino práctico. No es un camino teórico. Teorizar no lleva a nada, porque los laberintos de la mente son inagotables. El Bhagavad Gita compara este mundo a un enorme árbol baniano o manglar, tan intrincado complicado. Entonces recomienda cortar el árbol de raíz en lugar de estar escudriñando su composición. Ese corte de raíz es la práctica.
¿En qué consiste la práctica que me enseñó mi maestro?
Tiene tres partes, que llamaré: mi educación, lo que Nadie me da y mi compromiso con Nadie.
1) Mi educación: Sigo cuatro principios fundamentales que son: veracidad, austeridad, limpieza y misericordia.
Veracidad: implica decir siempre la verdad, jamás la mentira. En la práctica, no jugar juegos de azar ni apostar.
Austeridad: implica mantener mi mente en su estado natural y armonioso. En la práctica, no consumir drogas de ningún tipo, ni legales ni ilegales.
Limpieza: implica estar limpio por fuera y por dentro. En la práctica: baño diario y actividad sexual lícita. En otra entrada explicaré lo del sexo.
Misericordia: implica la no-violencia, a menos que yo fuera un tipo de juez. Como no soy juez de ningún tipo, sigo la no-violencia (ahimsa). En la práctica, además de por supuesto no agredir a seres humanos, no comer carne de ningún animal, ni huevos.
2) lo que Nadie me da:
Tengo muchos excelentes amigos. Nos reunimos a cada rato para fiestas espirituales donde comemos, cantamos y bailamos espiritualmente. Organizamos eventos en las calles de las ciudad, gratis y para todo el mundo. Organizamos reuniones gratuitas para informar teórica y prácticamente a las personas qué es lo que hacemos y cómo lo hacemos. Somos siempre felices, pacíficos y divertidos. Seguimos lo que nos enseñó nuestro maestro Prabhupada: "vida simple y pensamiento elevado". No tenemos ningún tipo de problema económico. Hay problemas, para que la vida no sea aburrida y para que sigamos superando desafíos, pero los solucionamos fácil y rápidamente.
3) mi compromiso con Nadie:
Tenemos un solo compromiso para con Nadie o Dios: rezar o cantar (lo que uno prefiera) una cierta cantidad de mantras todos los días sin falta.
No hay reglas ni regulaciones para esto, pero tenemos diversas técnicas que nos vamos comentando unos a los otros cuando descubrimos algo nuevo.
A veces, mientras uno reza los mantras, uno entra en diversos tipos de éxtasis o estados de conciencia diferentes al habitual.
Rezar el mantra te apacigua y concentra para toda la jornada, por eso solemos hacerlo apenas nos levantamos y bañamos, pero ya dije que no hay reglas ni regulaciones.
4) Aparte de todo lo nombrado, hay muchas otras prácticas que uno puede seguir si quiere. Yo por ejemplo no quiero hacer esas otras prácticas, y como no estoy obligado, no las hago. Pero las haré algún día, porque sé cuáles son sus beneficios, simplemente no quiero por ahora, tengo mis razones...
Este proceso es sublime y sencillo, se practica con alegría, y es el proceso indicado para la liberación en esta era de Kali. Existen otros procesos válidos que vienen de otras eras, pero son demasiado complicados o imprácticos para esta era.
En esta Era de Kali, este proceso es la única manera de liberarse, no hay otra manera, no hay otra manera, no hay otra manera.
Si quieren saber más sobre el proceso, tal como cuál es el mantra, escríbanme en privado a figueroagustin@gmail.com. También les daré direcciones de Internet donde podrán informarse más.
